(viernes 5 de abril de 2024)
Fénix
En la cima reinaba
en las altas montañas.
Sus plumas marcaban
sus alas en llamas.
Su hora llegó,
su cuerpo brilló.
Con una explosión
hacia el Sol se tornó.
Sus cenizas volaron
suaves como pétalos
en la brisa brincaron
y allí lo encontraron.
Con un destello del cielo
sus llamas brotaron.
Un grito de fuego
en la noche contemplaron.
Su esbelta figura,
su hermoso color.
Renacieron del fuego,
revivieron del dolor.
Coloso en llamas,
iluminó en luz
la asolada tierra
de su interior.
Imagen con licencia Wikimedia Commons.
Despertó su alma
del profundo sueño
que agonía y tristeza
le sometió.
Con su batir de alas
la nacida fuerza del Sol.
Con su mirada ardiente
el cielo estremeció.
Hubo nunca ninguno
poderoso ante él.
No por su fuego.
No por su espíritu.
Energía única
su fuerza sin igual.
En su despertar
no tendrá rival.
Autor: Jorge Lozano Alcaide, profesor de Matemáticas del IES Jorge Manrique.
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